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Disminuyen ventas, sufren comercios

Dan a conocer comerciantes que temen lo peor al no vender en la zona.

Escrito en Celaya el

Comerciantes de la calle principal de Purísima del Rincón, la José López Mojica, esperan que las obras por el cambio de imagen, afecten lo menos posible sus ventas, ya que la calle las autoridades les han dicho que la calle permanecerá cerrada hasta el próximo 30 de octubre.
Betzabe Ríos, quien atiende una frutería, indicó que les habían dicho que las obras estarían concluídas para el día 15 de octubre, pero que les avisaron que la obra se extiende hasta el final del mismo mes.
“Aquí estaba programa, el inicio de este lunes 4 de agosto al 15 de octubre, pero ahorita nos acabamos de enterar que del semáforo para allá, van a abrir el día 11, para terminar parejo el día 30 de octubre, los dos tramos”, comentó.
Para ella, ya se empezó a sentir la baja en las ventas.
“El Lunes, más o menos, ayer todavía vendimos algo pero hoy hay muy poca gente”, señaló.
“Como dicen: todo tiene un precio, pero vale la pena el arreglo, mientras sufriremos las consecuencias, esperemos que el beneficio sea mayor”, apuntó Betzabe Ríos.
María Ramírez, quien trabaja en una tienda de ropa, señaló que esperan que no sea tan duro el golpe para las ventas del local.
COMIENZAN MAL
“Sabemos que si no hay circulación de vehículos en la calle, nos vamos a afectar, en las ventas, ahora si que esperamos que sea lo menos posible, pero hoy la verdad está muy flojo”, señaló María Ramírez.
Este lunes se dio el “banderazo” de arranque en un segundo tramo de la obra de remodelación, comprendiendo de la calle Allende hasta la calle Madero, donde el día de ayer, se observó a una cuadrilla de trabajadores, con maquinaria pesada. Para reducir los conflictos viales primeramente se concluirá la remodelación hasta la esquina de la Madero.
Para esta obra, se aplican recursos del Programa de Participación Social, por una inversión de 4 millones 685 mil 881.20 pesos, en la pavimentación de 1,329.40 metros cuadrados, en concreto revestido de piso de basalto gris y rojo.
“La verdad sí es una buena obra, pero mientras tiene uno que aguantarse, esperamos que sí bajen las ventas la verdad, pero hay que seguirle; ahora si que como dijo el señor presidente, se trata de obras que no se hacen por capricho sino porque hacen falta”, señaló una empleada de una tienda de comida.

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