Para ICA es más difícil participar en nuevas licitaciones, porque ningún banco quiere otorgarle cartas de crédito o fianzas para respaldar sus propuestas.
Éstas son indispensables en los concursos de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, Pemex, la Comisión Federal de Electricidad y otros de sus clientes.
“Como resultado de nuestra situación financiera, se nos ha dificultado obtener las fianzas de cumplimiento o las cartas de crédito necesarias para realizar los proyectos de infraestructura grandes en México y en el extranjero que históricamente han generado una mayoría sustancial de nuestros ingresos”, admitió la empresa en su reporte anual a la BMV y a la Securities and Exchange Commission de EU (SEC) esta semana.
“Nuestra capacidad para proporcionar otras cartas de crédito y otras formas de garantías es limitada, lo cual es posible que afecte nuestra capacidad para participar en proyectos en el futuro”, agregó.
Desde hace meses, la constructora ha dicho que tiene sus esperanzas puestas en ganar concursos relacionados con el Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), el proyecto de infraestructura más grande del sexenio.
Hasta el momento, sólo ha ganado un contrato por 8 millones de pesos para construir un pequeño paquete de caminos de acceso, que ya terminó, pero todavía están pendientes las licitaciones más grandes, como la construcción de la terminal de pasajeros y las tres pistas.
Por otra parte, la empresa no puede seguir vendiendo los activos que le quedan para ganar liquidez, porque ya los usó como garantía para préstamos adquiridos.