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Afrontar parto ¡bajo del agua!

Esta alternativa de dar a luz implica un proceso más concientizado y menos dolor que el parto natural, pero es recomendado para embarazos de bajo ries

Escrito en Irapuato el

Si lo que buscas es una alternativa diferente al parto convencional, que sea sin medicamentos y en una atmósfera más íntima, quizá el parto en agua sea para ti.
"Cada vez más personas están buscando alternativas para tener un parto natural, sin bloqueo peridural, sin episiotomía y con personal capacitado en el área de la psicoprofilaxis", asegura la ginecobstetra Marta Alcalá, desde la Ciudad de México.
Esta tendencia consiste en concebir en una tina con agua a 34 grados centígrados. Algunas mujeres tienen las contracciones en el agua y salen al momento de parto, mientras otras permanecen en ésta aún durante el parto mismo.
Para Alcalá, esta alternativa se conoce como parto humanizado, pues tiene la intención de ofrecer a las madres un proceso más concientizado en el que se estimule la confianza y la intuición de la mujer para afrontar el parto como un evento para el que su cuerpo está preparado naturalmente. 
"No es sencillo ser diferente y humanizar, eso significa ofrecer respeto, paciencia, humildad y sentido común (a los pacientes)", comenta Alcalá.
Algunas medidas de confort como musicoterapia y aromaterapia, así como una luz tenue son clave para disminuir la tensión y que el parto fluya de mejor manera.
De acuerdo con Alcalá, al igual que en el parto normal, se protege el periné para evitar desgarres y en cuanto nace el bebé se pasa a la mamá para el apego temprano.
"Se pinza el cordón umbilical una vez que deja de latir y, si no hay ninguna complicación, el papá lo puede cortar en el momento en el que nosotros le indicamos. El alumbramiento o nacimiento de la placenta debe ser fuera de la tina", detalló la experta certificada por el Consejo Mexicano de Ginecología y Obstetricia.
El doctor Enrique Goldbard, médico por la UNAM, asegura que no es partidario de este tipo de procedimientos alejados del ambiente hospitalario. Para él, existen algunos riesgos bajos, pero posibles, relacionados con el cordón umbilical.
Además, establece que la creencia de que el bebé vive una experiencia estresante al abandonar el fluido amniótico para salir al exterior, es falsa.
"La suposición de que es mejor para el bebé pasar del ambiente líquido del amnios a otro similar y que esto tendrá alguna influencia sobre su conducta en el futuro suena poco seria", establece.
Para participar en este procedimiento es indispensable que la candidata atraviese un embarazo de bajo riesgo y tenga toda la información al respecto.
No se recomienda para pacientes que tienen embarazos múltiples, de alto riesgo, preeclampsia, diabetes gestacional, obesidad y desnutrición, cirugías uterinas o cesáreas previas, así como cuando el bebé no se presenta de cabeza.

LAS VENTAJAS

El periodo expulsivo del bebé es más suave.
El agua relaja el piso pélvico y no se hace episiotomía (incisión).
Los desgarros de periné son poco comunes.
El parto puede ser vertical, en cuclillas o en cuatro puntos.
El efecto de flotación disminuye el peso de la mamá y mejora la circulación sanguínea.
Menos dolor para la madre y mejor oxigenación para el recién nacido.

LAS DESVENTAJAS
cardiaca fetal es más difícil.
Realizar maniobras se vuelve complicado bajo el agua.
No hay anestesia peridural.
Puede haber infección por el agua contaminada con heces.
Si el cordón umbilical se enreda, el bebé podría tratar de inhalar y aspirar agua.
El cordón umbilical podría romperse mientras se traslada al bebé a la superficie.

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