Familiares y amigos del camionero que fue ejecutado en Celaya lo acompañaron a su última morada; con toques de claxon, los traileros pidieron justicia para su amigo.
Luego de que fuera velado en una capilla que se ubica por el hospital del IMSS, el cortejo salió con rumbo al Panteón Municipal, donde fueron depositados los restos humanos de quien en vida respondiera al nombre de Fernando Logan Márquez, quien contaba con 42 años de edad y era vecino de esta ciudad.
Más de 10 camiones de diferentes marcas acompañaron a Fernando en el trayecto al panteón, su familia desgarrada por esta pena iba en la parte delantera del cortejo; más atrás, otros familiares y amigos seguían en carros particulares, luego más de 10 camiones en la parte trasera del contingente hacían sonar sus cláxones en señal de solicitar justicia a las autoridades.
Algunos gritos se dejaron escuchar al pasar los camiones: “¡Queremos justicia!”, “¡que la muerte de Fernando no quede impune!”, ya que apenas el pasado miércoles cumpliendo con su trabajo se dirigía a la ciudad de México conduciendo un camión de carga con varias toneladas de carnes frías.
Al parecer, fue asaltado por personas desconocidas y no conformes con el robo, lo asesinaron y lo dejaron sin vida en el Libramiento Sur cerca de la caseta de cobro de Crespo, en Celaya, Guanajuato, lugar que es conocido por los traileros donde ocurren constantes atracos a los camioneros.
Fernando conducía un camión de la marca Kenworth, color blanco, modelo 88, con una caja tipo termo, donde trasportaba 23.5 toneladas de embutidos de la empresa Bafar, que se ubica en esta ciudad de La Piedad.
Las autoridades mencionaron al realizar las investigaciones, que todavía se logró comunicar con su esposa para informarle que iniciaba el recorrido a Iztapalapa, en la Ciudad de México, luego ya se supo nada, hasta que fue localizado en el lugar señalado a las 2 de la madrugada con 30 minutos del pasado jueves.

Por Redacción

Escrito en Opinión el 2/6/2013 · 00:00